La historia de Sparky es una de esas historias de abueletes que después de pasar toda una vida con la que él pensaba que era su familia, tuvo que encontrar una nueva en la que vivir los últimos años de su vida. Por suerte se cruzaron en su camino Marta y Miguel quienes al verlo y conocer su historia no dudaron ni un segundo en acogerlo en su casa. Sabíamos que no podía acabar en mejor casa, junto a Newton con el que comparte sofá…bueno mas bien el buenazo de Newton deja “su” sofá al anciano recién llegado. Muchísimas gracias família!!! Ojalá hubiesen mas como vosotros! Gracias! Gracias! y Gracias!